Branding es el proceso de creación de una marca, es la estrategia que se debe seguir para descubrir los activos vinculados a un nombre comercial y a su logotipo. En este proceso intervienen numerosos factores que deben interactuar en armonía. Diferenciarse es cada vez más difícil. La clave está en el poder de una marca como elemento diferenciador. La diferenciación parte de la identificación clara de intangibles como su valor, singularidad y credibilidad.
Una marca no es un logotipo, una marca es lo que los demás piensan de vos, cómo te perciben, qué emociones despertás y qué es lo que otros dicen de vos a los demás. Nada es más importante que tu marca pues define la esencia de tu empresa.
Un logotipo es un conjunto de signos, letras, formas y colores que transmiten la identidad de una empresa o producto. Ante todo, debe ser diferente a cualquier otro, fácil de recordar y simple. ¡Menos es más!
Muchas veces las empresas nuevas necesitan ayuda en la creación de un nombre de fantasía para su marca. Se denomina “Naming” a la creación de un nombre que representa a una empresa y transmite los valores diferenciados de la marca. Es muy importante que el nuevo nombre sea original. Se debe verificar que otra empresa o persona no tenga registrada una marca similar antes de solicitar el registro en INPI (para la Argentina), sobre todo si pertenece al mismo rubro.
Antes de diseñar un logotipo se realiza un trabajo previo de investigación. Si el nombre coincide con otro preexistente y ya registrado no será posible registrarla como propia. Una vez que se ha comprobado que no existen coincidencias con nombres ya registrados, se solicita el registro para acceder a los beneficios que otorga la ley para hacer uso exclusivo de la marca y protegerla. En Argentina las marcas registradas están vigentes por un período de diez años, cumplidos los primeros cinco años, el titular debe declarar el uso de dicha marca.
